Si naciste entre los 70 y los 80 es probable que recuerdes aquello de ‘Póntelo, pónselo’, una de las primeras campañas para concienciar sobre el uso del condón entre la gente joven. Eran los años 90 y la campaña, que recogía la estela de una línea de planificación familiar institucional iniciada en los 80 tras el franquismo, levantó ampollas entre los sectores sociales más conservadores. Era la primera campaña que de manera oficial se dirigía a chavales y chavalas y tocaba temas de calado más allá del embarazo: las infecciones de transmisión sexual y VIH, un virus detectado por primera vez en los 80 en Estados Unidos y del que no existía mucha información.
Más de 30 años después las campañas para sensibilizar y prevenir sobre VIH ya forman parte de la agenda de la mayoría de las instituciones, que además han ampliado su contenido para incluir otras infecciones de transmisión sexual (ITS) como la sífilis, la clamidia, la gonorrea o la hepatitis B y C.
Más infecciones entre la población joven
Sin embargo, y a pesar de vivir en un momento de sobreabundancia informativa, los casos de VIH y otras ITS se han incrementado en las dos últimas décadas, sobre todo entre la población más joven.
Según datos del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, entre los años 2008 y 2015 los casos de sífilis aumentaron un 45%, mientras que los de gonorrea crecieron un 153%. De hecho, la mitad de nuevos casos de gonorrea y cerca de un tercio de los de sífilis en España afectaron a personas de menos de 30 años. En solo 15 años los casos de sífilis en España se han multiplicado casi por seis: han pasado de 700 a unos 4.000 .
Si hablamos de VIH, los datos tampoco son muy esperanzadores. Según el último informe de vigilancia epidemiológica de VIH y SIDA en España, aunque la mayoría de los nuevos diagnósticos están entre los 30 y los 39 años (33,6%), un 25,9% (867 casos) tenía menos de 30 años en el momento del diagnóstico de VIH y hasta un 11,1% tenía entre 15 y 24 años.
¿Cuáles son las causas de este repunte? ¿Falta de información? ¿De recursos? ¿Qué papel juega la educación sexual en todo esto? ¿Cómo son las campañas que se dirigen a la gente joven? ¿Ha habido muchos cambios desde aquel ‘póntelo pónselo’?
Por puro placer: prevenir e informar
Nuestra hipótesis es que pocos, la verdad. El pasado mes de octubre comenzamos a diseñar una campaña de comunicación en el marco de un proyecto de intervención comunitaria para sensibilizar a la población joven sobre VIH y otras ITS. La propuesta nos la hacía la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid a través de la Subdirección General de Promoción, Prevención y Educación para la Salud, con la colaboración del Ayuntamiento de Torrejón de Ardoz y ViiV Healthcare.
Teníamos claro el enfoque inicial: queríamos hablar de sexualidad y relaciones de buen trato y queríamos saber la opinión de chavales y chavalas. El resto eran interrogantes. Por eso nos lanzamos a investigar qué estaba pasando con la información y las campañas relativas a las ITS y la población joven a través de dos herramientas: un proceso de documentación y análisis de las campañas gracias a recursos on line como Sida Studi y un taller con población joven en Torrejón para detectar estereotipos y prejuicios en torno a las ITS.
Fruto de este proceso y grandes debates nace Por puro placer, una campaña de comunicación hecha por jóvenes y para jóvenes con el objetivo de sensibilizar sobre las ITS. Este proyecto apuesta por poner el foco en cuestiones que trascienden lo meramente preventivo e imperativo para ir a la base del iceberg: promover las relaciones de buen trato, una sexualidad disfrutona pero bien informada y con recursos accesibles para la gente joven. Siempre teniendo en cuenta la diversidad y la perspectiva de género. La imagen debía estar a la altura del mensaje y por eso montamos esta divertida sesión de fotos.
De momento la campaña está en una fase preliminar, pero os iremos contando el resto de actividades, que hay muchas, en la web de Por puro placer.
